En la accidentada planta nuclear de Fukushima I nuevamente ocurrió una fuga de agua radiactiva. De acuerdo con la compañía operadora, la situación ya está fuera de control. En los últimos tres días el nivel de tritio (hidrógeno superpesado) en las aguas subterráneas de Fukushima aumentó en más de veinte veces, y en estos momentos sigue creciendo.
En agosto, una de las cisternas de la planta comenzó a derramar su contenido. Casi trescientas toneladas de agua radiactiva, almacenadas después de enfriar los reactores de la planta, fueron liberadas al medio ambiente. Este incidente fue el más grave desde que en marzo del 2011 ocurrió la terrible catástrofe.
A la comunidad "internacional" debería darles vergüenza en ser cómplice de un gobierno que miente, que hará todo lo que esté a su alcance para tergiversar la realidad, e impulsar una economía realizando “favores” que rodea la financiación de los Juegos Olímpicos de 2020, incluso el coste humano de este plan es, efectivamente, desconocido y potencialmente sin precedentes .
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